Era una experta en llenar cualquier espacio de duda con las suposiciones más terroríficas del viernes 13.
Mi cabeza estaba habitada por toda clase de miedos, de interpretaciones y de malos entendidos. Así vivía, paralizada por las historias que solita me contaba y que además jamás se hacían realidad.
Yo me enojaba, me contentaba, sufría, me atacaba y los demás ni enterados.
Un buen día, me encontré con un libro que cambió mi vida y ese libro decía NO DES NADA POR SUPUESTO.
¡¡QUEEEEEE!! ¿Puedo liberarme de tanto susto con el simple hecho de preguntar, averiguar, hablar y aclarar?
Pues si, empecé a dejar atrás los sufrimientos de Pepe el Toro y me hice cargo de mi mente. Aclaré malos entendidos pregunté mis dudas e imaginé situaciones amorosas en vez de dolorosas.
Al dejar de construir historias, me pude dar cuenta de éstos 4 puntos que me permitieron dejar la tragedia de suponer.
1. Cada quien tiene una percepción diferente
El otro no ve las cosas como yo las veo y no porque esté equivocado, sólo porque es otro y eso le da diversidad a la vida.
2. No soy el ombligo del Universo
No todo el mundo está pendiente de mi y no todo lo que pasa a mi alrededor se centra en mi persona. Afortunadamente.
3. Soy la directora de mi propia película
Sólo yo pienso en mi mente, yo decido como quiero pensar.
4. Mis peores sufrimientos han sucedido sólo en mi imaginación
Yo los he creado, así que yo también puedo cambiar la cinta y dejar atrás el dolor de ser creativa.
Espero que ésta historia de la vida real te ayude a disfrutar más tu vida y crear menos películas de terror y más de amor.
Tú decides.
Muchos saludos,
Elena Santos
PS El Libro se llama Los Cuatro Acuerdos de Don Miguel Ruiz, por si tenías la duda.
