El caso es que ya no tengo tiempo que perder, ya no tengo tiempo de andar pajareando por la vida pensando que no me voy a morir, porque si lo voy a hacer y quiero aprovechar cada segundo que me quede.
Quiero vivir consciente de que nada está bajo mi control, que la vida se mueve y que la vida es hoy, en este momento.
Durante mucho tiempo estuve en el ya merito. Ya merito soy feliz, nada más queeeeeeeee baje 3 kilos, corra una carrera, me vaya de viaje, termine lo que ando haciendo, crezcan mis hijas, etcétera, etcétera, y miles de etcéteras más.
Y el asunto con el ya merito es que mi mirada esta en el destino más que en el camino y hoy, a mi vetusta edad sé que LA VIDA ES EL CAMINO y el destino llega por añadidura o no, pero ya no importa, porque el gozo estuvo en el camino.
Esto me da una paz enorme. Poner mi atención en el ahora me libera de la expectativa, del miedo al fracaso y del ya merito para vivir la vida deadeveras hoy.
¿Y tú sigues en el ya merito?
Muchas bendiciones aquí y ahora,
Elena Santos
